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lunes, 17 de marzo de 2008

A propósito de Arcadio

El 2 de Enero de 1.887 en el nº 48 de "El Centinela de Osuna", Francisco Rodríguez Marín nos habla de nuestro Patrono. Justifica su artículo"por ser enemigo del falso patriotismo que aconseja a los hombres a enaltecer a sus pueblos con glorias falsas o ajenas"(sic).

Dice que hasta el siglo XVI Osuna no sabía nada de San Arcadio Mártir y se basa en un documento de 24 de Abril de1.510, en el que el Concejo, Justicia y Regimiento, acuerda hacer tres procesiones anuales para guardar al pueblo de pestilencia no habiendo mención alguna para Arcadio.


A principio del XVII, se pregona a los cuatro vientos una crónica desconocida, atribuida a Flavio Dextro (siglo IV), piadoso varón del entorno de San Jerónimo, por la cual se supo que el San Arcadio del 12 de Enero, había padecido martirio en Osuna. De este modo a partir de 1.624 se comienza a celebrar el Santo.


Con exageración piadosa, el pueblo añadió Osuna como lugar de nacimiento y con prisas y sin pausas se construye en dos años su ermita(1.631-1.633), a expensas de las limosnas de los entusiasmados Ursaunenses. Entre tanto el Padre Quintadueñas, imagina que el San Arcadio Ursaunense es el mismo del que habla San Zenón, Obispo de Verona y, refiere pormenorizadamente el suplicio en base también al documento de Dextro para fijar el martirio en el año 110 d.C.


El fervor no queda ahí, sino que se funda Hermandad y el Concejo de la Villa por votación popular en 1649, nombra Patrono de Osuna a Arcadio, León, Donato, Abundancio, Nicéforo y nueve compañeros más,por las grandes mercedes que por su intercesión recibimos de Dios Nuestro Señor.


En 1.697 finaliza la hechura de la imagen y se acuerda llevarlo en procesión a hombros a la Colegiata "este año y los venideros". Sin embargo, parece que todo esto es insuficiente. Hacía falta un libro excusivamente consagrado a narrar la vida del santo, problema que solventa Fray Fernando de Valdivia, agustino, Teólogo por la Universidad de Osuna y Catedrático en la misma de "Prima de Sagrada Escritura". En 1.711 ve la luz en Córdoba su obra: Historia, vida y martirio del glorioso Español, San Arcadio Ursaonense. A juicio de Rodríguez Marín, en este libro la piedad lo pone todo y la lógica nada.


Días más tarde, en el nº 49 de 9 de Enero de 1.887, también en el "Centinela de Osuna", en un extenso artículo, pone en duda todo lo dicho, en cuanto al Santo Patrón, relacionado con su pertenencia y martirio en Osuna, argumentando que el documento de Flavio Dextro es falso y escrito por un Jesuita, llamado Jerónimo Román. La fuente de Rodríguez Marín, es la escuela bolandista, nombre por el que se conoce en el mundo de las letras eclesiásticas a estos doctos varones o por Padres Antuerpiensis, por estar ubicados en la Ciudad de Amsterdan. No sé dónde están los originales de los artículos mencionados (los he podido leer gracias a unas fotocopias regaladas por mi amigo Miguel Caballo), pero se deberían publicar, para que este debate cerrado hace siglo y cuarto, se abra y, se conozcan otros argumentos igualmente autorizados.


Naturalmente que prevalecerá la tradición, la costumbre y sobre todo que nadie entienda esto como un intento de atacar pilares de fe o creencias arraigadas en nuestro pueblo. Sencillamente, Rodríguez Marín no ha sido rebatido, al menos que yo sepa, y me parece un tema de interés, repito, solamente desde el campo de la investigación. Como prueba de ello termino diciendo lo que nuestras abuelas cantaban: Viva Osuna que es mi tierra, San Arcadio mi Patrón.



Albareda drei


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