Ya olemos la feria y su ambiente. Qué cerca está una de las fechas más importantes y alegres de Osuna. La verdad es que hay muchas ganas de respirar un poco de ambiente de alegría y fiesta. Como joven que soy siempre he disfrutado mucho con la feria de nuestro pueblo, pero tal vez por los años acumulados o porque los años le hacen a uno mirar las cosas de otra forma, veo que las cosas no se terminan de mejorar.
Considero que esta fecha festiva, debe ser ante todo espacio y momento de encuentro, diversión, de buen rollo y sobre todo lugar de reunión y seguridad. Los jóvenes de Osuna han perdido casi la oportunidad de contar con momentos de unidad y convivencia. Es una realidad que el botellón (voy a definirlo porque creo que es necesario que muchas personas que no lo han practicado lo conozca), es simplemente el término que describe la costumbre extendida en España desde finales del siglo XX, sobre todo entre los jóvenes, de consumir bebidas alcohólicas, refrescos, snacks, tabaco e incluso, en algunos casos, drogas ilegales, tanto duras como blandas, en grupos relativamente numerosos y en la vía pública).
Hay que dejar claro, que para muchos ha sido un alivio que este fenómeno social se haya casi extinguido, para otros muchos es una buena noticia porque hay más personal interesado en acudir a sus negocios, pero yo como joven siento que no se gana, sino que se pierde. Se pierde la posibilidad de relacionarse con tus conocidos, de hablar y discutir posturas, ideas o simplemente de compartir risas y bromas entre unos y otros.
A su vez cuando miró hacia años pasados recuerdo cómo la feria era un revoltijo de gente de muchos orígenes, gente de Osuna y gente de otros pueblos y principalmente gente joven. Recordamos como nos encontrábamos con nuestros compañeros del bachillerato que residían en otros pueblos y cómo la fiesta era mayor, porque sencillamente éramos más.
Personalmente y con la sinceridad que el teclado me permite, compruebo cómo año tras año la feria de Osuna está perdiendo visitantes, sobre todo de este tipo de público joven que tanto nos interesa y al que de una forma u otra represento. Por ello creo que es mejor prevenir que curar, es decir, para muchos el motivo de la pérdida de visitas la tiene la dirección general de tráfico y sus campañas. Eso creo que se podría mejorar con un acuerdo entre los promotores de las casetas y el Ayuntamiento para acercar y devolver a los vecinos de las localidades próximas como bien apuntaba un comentario en otro artículo. Pero creo que la clave es otra. Sinceramente creo que las autoridades así como las fuerzas de seguridad vinculadas a Osuna deben ayudar a mejorar la seguridad de nuestra feria, de nuestra fiesta con el fin de que vuelva a ser una fecha deseada por muchos.
Aún recuerdo años en los que las peleas y las “carreras populares” en post del linchamiento de algún vecino de otro pueblo eran muy comunes. Uno se quedaba perplejo y miraba a su alrededor y no veía a nadie, ni a Policía Municipal ni a Guardia Civil, vamos que no veía ni al amigo menos valiente.
Por ello y con el más sincero objetivo de que todos podamos disfrutar de nuestra feria de Osuna, desde esta tribuna y viendo los toros desde otra perspectiva me gustaría enviar dos “mensajes” claros. Uno a ti, que como yo eres joven y te gusta divertirte: Por favor intenta que tu feria sea mejor cada año, intenta que la persona que viene a visitarte se sienta cómoda y segura, porque ella, al igual que tú, sólo quiere pasarlo bien y recordar la visita a tu pueblo como algo positivo.
El otro mensaje es para ti, para quien tenga la potestad de cambiar las cosas. Como ciudadano necesito y deseo sentirme tranquilo y seguro en mi feria, necesito saber que hay gente que pueda atajar una pelea, que pueda ayudar al mal bebedor, necesito pensar y creer que no hay peligro y que tal vez mis prejuicios son una estupidez. Porque considero que también es un estereotipo erróneo pensar que la policía me estorba y es un cortarollos. Sobre todo porque he vivido ferias como la de Sevilla y la de Málaga en los que la policía no me ha estorbado para disfrutar, todo lo contrario. Feliz feria 2008.
Carlos Lucas López