Dice el artículo 43 de la Constitución, en su apartado 3: “ Los poderes públicos fomentarán la educación sanitaria, la educación física y el deporte. Asimismo, facilitarán la adecuada utilización del ocio”.
Pues bien, cuando te acercas al Polideportivo de Osuna parece que nuestros poderes público desconocen o han olvidado dicho artículo.
Llevo muchos años haciendo deporte, y muchos años acudiendo al polideportivo y creo que estas instalaciones y su organización están llegando a una situación límite que conviene denunciar.
En la tarde del martes 3 de junio me desplacé a dichas instalaciones para hacer un poco de deporte, cuando llegué al Pabellón, me lo encontré en obras, situación que ya conocía, pero mi sorpresa vino cuando le pregunté al funcionario/a qué vestuarios podía utilizar y me dijo que los del Pabellón, pero bajo mi responsabilidad por si me ocurría algo, y que para ducharme que le preguntara a su compañero pero que creía que no había duchas habilitadas.
Cuando terminé de hacer deporte localicé al otro funcionario y cuando le pregunto dónde me puedo duchar, me dice que “en mi casa”; le pregunto por los vestuarios de la piscina y me dice que están cerrados.
Con todo esto, no quiero que entiendan que mi denuncia va dirigida a dichos funcionarios, que pienso que cumplen con sus obligaciones; pero sí opino que el deporte en Osuna merece algo mejor.
Y por último, reseñar, para aquellas personas un poco ajenas al mundo del deporte que pudieran pensar que esto pudieran ser hechos ocasionales con motivos de las obras, comunicarles que en los últimos 8 ó 10 años hechos parecido a los que aquí relato han sido varios.
Un ursaonés
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